Una soleada mañana de sábado, Leo y Mia decidieron explorar una parte del bosque en la que nunca habían estado antes. Armados con una mochila llena de bocadillos y un mapa que había dibujado el hermano mayor de Mia, se pusieron en marcha con emoción. Mientras se adentraban más en el bosque, se toparon con una roca peculiar y brillante medio enterrada en el suelo.
"Vaya, ¿qué es eso?" preguntó Mia, sus ojos grandes reflejando la extraña luz. "No sé", respondió Leo, sintiendo un extraño tirón hacia la roca. Se agachó, limpió la tierra y la recogió. En el momento en que sus dedos tocaron la superficie, un chorro de energía recorrió su cuerpo. Su visión se nubló por un segundo y sintió como si el mundo a su alrededor hubiera cambiado. Cuando parpadeó, todo volvió a la normalidad, excepto que ahora sostenía la roca con fuerza, y ya no brillaba.
"¿Estás bien, Leo?" preguntó Mia, su voz teñida de preocupación.
"Creo que sí", dijo Leo lentamente, aunque no podía sacudirse la sensación de que algo había cambiado. Decidieron regresar a casa, pero Leo no podía dejar de pensar en la roca. Esa noche, mientras yacía en la cama, notó algo extraño. Cada vez que se concentraba, pequeños objetos en su habitación como su despertador y un lápiz flotaban unos centímetros sobre el suelo. 😲 Al principio, Leo entró en pánico. ¿Estaba imaginando cosas? ¿Estaba soñando? Pero después de experimentar un rato, se dio cuenta de que era real. De alguna manera, tocar la roca brillante había despertado un poder oculto dentro de él ¡la capacidad de mover objetos con su mente, telequinesis! El pensamiento lo llenó de partes iguales de emoción y miedo. ¿Qué haría con esta nueva habilidad? ¿Debería decírselo a alguien?
Al día siguiente, Leo confió en Mia.
"¿Telequinesis? ¿Hablas en serio?!" exclamó Mia, con la boca abierta. "¡Eso es increíble, Leo! ¡Muéstramelo!" Leo dudó, pero luego se concentró en una pelota de fútbol cercana en el jardín de Mia. La levantó en el aire con su mente y la hizo girar lentamente. Mia jadeó de deleite, aplaudiendo. "¡Esto es lo más genial de todos los tiempos! ¿Sabes lo que esto significa?
"¿Qué?" preguntó Leo, aún nervioso.
"¡Significa que tienes un don!" dijo Mia. "¡Podrías usarlo para ayudar a la gente, tal vez incluso salvar vidas!" Leo no estaba seguro de salvar vidas, pero la idea de ayudar a los demás le atraía.
Una tarde, mientras practicaban en el bosque, una anciana llamada Sra. Castor se acercó a ellos. Ella era la bibliotecaria del pueblo y a menudo daba paseos por el bosque. Cuando vio a Leo levitando una rama caída, sus ojos se abrieron de par en par, pero en lugar de asustarse, sonrió.
"Veo que has descubierto tu don, joven", dijo amablemente la Sra. Castor. Leo y Mia intercambiaron miradas de asombro. "¿Tú… sabes sobre esto?" preguntó Leo.
"Oh, sí", respondió la Sra. Castor. "Este pueblo tiene una larga historia de individuos con habilidades únicas.
"Porque estos dones son raros e impredecibles", explicó la Sra. Castor. "Y vienen con una responsabilidad usarlos sabiamente y desinteresadamente.
Una noche de tormenta, se presentó la oportunidad de usar sus poderes. La intensa lluvia había causado que el río se desbordara, y el puente que conectaba las dos mitades del pueblo estaba a punto de colapsar. Peor aún, un autobús escolar lleno de niños estaba atrapado en el puente. Los equipos de emergencia estaban tratando de ayudar, pero el tiempo se acababa.
Después, las habilidades de Leo se convirtieron en un secreto a voces en el pueblo.
Fin.
Una roca dorada que brilla.
¡Ganó el poder de la telequinesis!
Pudo mover objetos con su mente.
Su mejor amiga Mia y la Sra. Castor.
Cómo usar sus poderes sabiamente y con responsabilidad.
Usó sus poderes para mantener el puente unido.
Usarlos para la bondad y ayudar a los demás.
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